POLITIQUEROS DE OFICIO

La economía colombiana en 2020 enfrento la mayor crisis de nuestra historia moderna, decreció un 6,8% equivalente a una pérdida del orden de 70 billones de pesos, y se caracterizo por un alto incremento en el desempleo de mujeres y jóvenes. Mientras todo esto sucede nuestros dirigentes de todos los pelambres, politiqueros de oficio, se reúnen para confabular alianzas que les aseguren la Presidencia de la República en los años 2022 y 2026. La verdadera política se define como el arte de mejorar la calidad y el nivel de vida de un pueblo, como lo hacen por ejemplo los escandinavos, que siempre encaminan sus acciones a garantizar unos países más prósperos y sostenibles a las futuras generaciones. Pero a los nuestros solo les interesa la próxima elección, para su continuo enriquecimiento personal y mantener toda esa fronda burocrática y de contratos, que lo único que logran es usufructuar el presupuesto nacional, afectando el trabajo honesto de la mayoría del pueblo colombiano. Se dice que todo país por acción o por omisión tiene los dirigentes que se merece, por eso imploramos a Dios que el día de las elecciones logremos en la mayoría del pueblo colombiano, un alto nivel de conciencia respecto a su inmenso poder para cambiar el rumbo. Creemos profundamente en el trabajo ético fuerte y sostenido, como el pilar fundamental en la construcción de una Colombia grande y próspera, de la cual nos sintamos muy orgullosos. Consideramos que la demagogia el populismo la anarquía y la violencia solo engendran pobreza y una mayor inequidad. Necesitamos con urgencia Políticos íntegros con visión positiva del futuro y no más politiqueros de oficio.

- Alvaro de Jesús Sarria Ávila